Ciudad de México.- Los bloqueos carreteros realizados durante esta semana por la Asociación Nacional de Transportistas (ANTAC) y diversas organizaciones campesinas confirman la profundidad de un problema que se extiende por todo el país, comunicó Coparmex Nacional.
Por ello, la dirigencia nacional junto con los 71 Centros Empresariales, subrayaron la urgencia de atender una problemática que exponen se ha vuelto insostenible para la actividad productiva del país.
De acuerdo con el sondeo realizado entre los Centros Empresariales de la organización, 33 de 55 ciudades y regiones participantes reportan afectaciones directas en carreteras, aduanas fronterizas, nodos logísticos y rutas estratégicas, particularmente en Jalisco, Guerrero, Chihuahua, Ciudad Juárez, Michoacán, Zacatecas, Veracruz, Durango, Puebla, Sonora, Baja California, Guanajuato, Cuauhtémoc, Tamaulipas, Hidalgo del Parral y regiones de San Luis Potosí y Guasave.
Estas interrupciones ya generan retrasos, pérdidas económicas y riesgos para empresas y transportistas que dependen del flujo continuo de mercancías.
“Respaldamos las demandas planteadas por transportistas y productores agrícolas, quienes enfrentan diariamente robos, extorsiones, cobro de piso y agresiones que ponen en riesgo su integridad y su patrimonio. Su llamado a contar con condiciones mínimas de seguridad para trabajar es legítimo y refleja una realidad que se ha normalizado a niveles inaceptables”, citaron.
Al mismo tiempo, enfatizaron que estos reclamos requieren respuestas inmediatas y coordinadas por parte de las autoridades, pues la gravedad del fenómeno exige acciones que garanticen seguridad en carreteras, rutas de carga y puntos logísticos, evitando que la ciudadanía y las actividades económicas sigan siendo rehenes de la violencia.
La inseguridad en carreteras no solo afecta al transporte de carga, fustigaron, pues compromete también la operación de cadenas productivas, incrementa costos logísticos, deteriora la competitividad regional y coloca a México en desventaja frente a sus socios comerciales.
Sin rutas seguras no hay abastecimiento confiable, y sin abastecimiento confiable se frenan la inversión, la creación de empleo y el crecimiento económico. A esto se suma la ausencia de instituciones financieras que realmente apoyen al campo, pues hoy no existen créditos adecuados para sembrar ni instrumentos que permitan a los productores sostener su actividad frente al incremento de costos y la volatilidad del mercado.
“El desafío exige coordinación real. Llamamos al Gobierno Federal y a los gobiernos estatales a trabajar juntos en un esquema inmediato que incluya vigilancia efectiva en tramos de alto riesgo, atención a denuncias por extorsión, operación funcional de trámites indispensables para el transporte de carga y mecanismos de conciliación que involucren a productores, transportistas, gobiernos y empresas”, dijeron.
Recalcaron que ninguna solución será sostenible sin una estrategia conjunta que atienda de raíz los factores que originan estos conflictos. Por lo que reiteraron su llamado firme al Gobierno Federal para ofrecer soluciones efectivas a la crisis que enfrentan productores agrícolas en distintos estados, particularmente por el precio pagado por la tonelada de maíz, el cual no cubre los costos necesarios para sostener la operación de los agronegocios.
Externaron que esta problemática ya genera afectaciones directas a socios y socias de Centros Empresariales COPARMEX, quienes han visto disminuidos sus ingresos y comprometida la viabilidad de sus empresas ante la ausencia de apoyos reales que permitan mantener operaciones, preservar empleos y contribuir al desarrollo
económico regional.
Por último consideraron indispensable que las autoridades instalen una mesa nacional de diálogo con participación de los sectores afectados y con una representación equilibrada de los estados donde la situación es más grave.
Dicha mesa debe generar compromisos claros, con plazos verificables, inversión suficiente, operación coordinada y criterios homogéneos que garanticen un entorno seguro para quienes trabajan en la producción agrícola, el transporte y la logística.







