Aproximadamente el 75% de las personas que tramitan su visa de turista en el Consulado de Estados Unidos en Hermosillo sale con una sonrisa.
Antes de la pandemia esta oficina atendía entre 600 y 800 citas diarias de personas y familias que acudían a solicitar el documento, tanto por primera vez como renovación.
El destino preferido es Arizona. Hasta el año pasado los sonorenses gastaban 2 mil 500 millones de dólares al año en viajes dicho estado; la mitad de ese dinero sólo en la ciudad de Tucson.
Sin embargo fue el 21 de marzo cuando -por motivo de la contingencia por COVID-19- el Consulado de Estados Unidos en México informó que limitaría temporalmente el cruce a la frontera por tierra y sólo podrían cruzar quienes comprobaran “motivos esenciales”.
La restricción podría seguir vigente hasta el 20 de agosto, de acuerdo con datos de la Embajada y Consulados de Estados Unidos en México, delegaciones que también limitaron temporalmente sus labores.
¿Cómo han afectado estas medidas a los sonorenses? ¿Cómo ha resentido Tucson la falta de visitantes? ¿Cuándo se establecerán actividades consulares? Son preguntas que se está haciendo la gente. Están analizando la situación.
De acuerdo con Erin Williams, jefa de la sección de visas de no inmigrante en el Consulado General de Estados Unidos en Hermosillo, el año pasado autorizaron visas a 80 mil personas.
La oficina de Hermosillo es uno de los nueve consulados del país -hay en Nogales, Ciudad Juárez, Tijuana, Matamoros, Nuevo Laredo, Guadalajara, Monterrey y Merida- y recibe en su mayoría solicitantes de Sonora y Sinaloa.
Indicó que desde el 18 de marzo suspendieron los servicios debido a la contingencia por COVID-19, no obstante en circunstancias normales suelen programan entre 600 y 800 citas al día.
Erin Williams dijo que todavía no hay fecha para restablecer la emisión de visas, sin embargo el Consulado de Estados Unidos en Hermosillo se mantiene abierto para trámites urgentes y necesidades que tengan los ciudadanos estadounidenses.
“Lo más importante para nosotros es la salud y el bienestar del personal y de los visitantes de nuestras instalaciones, estamos estudiando la situación de cerca y tomaremos la decisión cuando podamos, pero quiero enfatizar que no estamos cerrados para servicios de emergencia y operaciones esenciales”, destacó la encargada de visas de no inmigrante.
Con respecto a qué se refiere cuando hablan de viajes esenciales Erin Williams indicó que son “mexicanos que tienen razones urgentes de viajar a Estados Unidos, de trabajo específicamente en el ramo de agricultura y cualquier apoyo de esfuerzos contra la pandemia”.
Mil millones de dólares al año gastan mexicanos en Tucson
Para J. Felipe García, vicepresidente de la empresa Vámos a Tucson, los sonorenses visitan Arizona y especialmente Tucson para visitar familiares, acudir a algún evento y en un 70% para hacer compras.
El negocio -que tiene veinte años- cuenta con oficinas en Ciudad Obregón y Hermosillo desde las cuales promueven el turismo, los negocios y en general la relación entre Sonora y Tucson.
De acuerdo con el vicepresidente de Vámos a Tucson es Semana Santa, el verano -cuando los niños salen de clases y previo a que inicie el ciclo escolar- y la temporada navideña las fechas de mayor afluencia.
“El visitante mexicano gasta mil millones de dólares al año en Tucson, es dinero que viene con los visitantes que cruzan la frontera e impacta en centros comerciales, hoteles, restaurantes, servicios médicos, definitivamente el impacto económico es significativo para todo el estado de Arizona y para Tucson”, agregó Felipe García.
Para facilitar que los sonorenses visiten esta ciudad de Arizona el director de Vámos a Tucson puso de ejemplo que hace años gestionaron la exclusión de permiso.
“Cuando entras a Estados Unidos se necesita una visa y si vas a pasar cierta distancia, 25 millas de la frontera se ocupa sacar un permiso, nosotros cabildeamos en Washington para que se extendiera a 75 millas de la franja de Arizona”, comentó.
Ya no se ven placas mexicanas en el mall
De acuerdo con Tim Steller, columnista del diario Arizona Daily Star, la ausencia de sonorenses en las ciudades fronterizas -como Nogales, Yuma, Douglas y Tucson- es evidente.
El periodista dijo que en los 23 años que ha dado cobertura a la frontera de Sonora con Arizona nunca había presenciado una situación similar y que afecta económicamente
“Los municipios fronterizos dependen por su presupuesto local de los visitantes mexicanos que vienen de compras, en Nogales por ejemplo como el 50% del IVA local deriva de los visitantes mexicanos”, comentó el periodista.
Según Tim Steller en Tucson están “acostumbrados a ver las placas sonorenses por los “malls” y por la tienda Target” y que esto pudiera estar relacionado a que están cerrando establecimientos”.
“Ya no se ven placas mexicanas en los estacionamientos y la verdad están cerrado restaurantes, algunos centros comerciales perdiendo negocios y sí está grave la situación para esos comercios que dependen de visitantes mexicanos, falta gente”, consideró.
Steller hizo hincapié que en más de 20 años dando cobertura a la frontera Arizona- Sonora ha visto muchos choques económicos o políticos que afectan el comercio transfronterizo, pero esta temporada ha sido la más severa.
“En este caso es mucho peor porque la gente no puede cruzar, es decir en otros casos la gente sí podía pero no tenía el dinero o tiempo pero se recuperó la economía y regresó la gente, ahora no hay clientes suficientes en muchos negocios en el sur de Arizona”, puntualizó Tim Steller.
De dos a tres veces en el año
La pandemia y la restricción de no poder ingresar a Estados Unidos cambió los planes de algunos sonorenses, quienes no pudieron llevar a cabo actividades que tenían programadas desde tiempo atrás.
Proyecto Puente realizó un sondeo entre hermosillenses. Los entrevistados coincidieron en que viajaban a Tucson de dos a tres veces en el año para compras, visitar familia o realizar alguna actividad.
“Lo que más nos pudo fue el viaje de graduación de primaria de mi hija Paula, irían a Disneylandia con la escuela, ella tenía años ahorrando y esperando con ilusión”, comentó Carolina Torres, de 31 años de edad.
Para Gonzalo Dórame la medida de cierre fronterizo significó no poder ir a la ciudad de Phoenix, Arizona en donde tomar un avión para reencontrarse con su hija que estudia en Canadá.
“La idea era ir por ella agarrando avión en Phoenix, pero no pudimos y tuvimos que cancelar esa maniobra y que ella se fuera a la Ciudad de México y de ahí volara a Hermosillo”, explicó el hermosillense de 52 años de edad.
Antes de que comenzara la pandemia por COVID-19, Lourdes Gómez Rentería se había inscrito a un maratón en la ciudad de Ventura, California.
“Teníamos dentro de los planes correr este año una carrera llamada “Mountain 2 Beach” en mayo y debido al cierre y a la contingencia se canceló el evento”, agregó la deportista de 50 años de edad.
Con información de Proyecto Puente.
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