San Luis Río Colorado, Sonora.- Antes de empezar a escribir quiero decir que realizo esta columna con mucho respeto, en parte porque guardo amistad con algunos integrantes de Cabildo, sin embargo, como dice el dicho: «Al César lo que es del César»
Este jueves el gobierno local emitió un comunicado donde el Secretario Municipal, Angel Acacio Angulo, reconocía la labor de los regidores, en parte por aprobar iniciativas en beneficio de la comunidad y el municipio.
No voy a discutir eso, dado que en efecto se empujaron iniciativas de importancia para la ciudad. Sin embargo, en lo que respecta a la labor comunitaria, a la labor de oposición y al simple quehacer político que implica un espacio en Cabildo, la verdad es que la mayoría dejó mucho que desear.
En las pasadas administraciones del 25 y 26 Ayuntamiento, surgieron personajes como Héctor Chacón Silva, Ricardo Martínez, Víctor Acosta Cid y Víctor Hugo Galarza, regidores que en su momento fueron ediles del partido en el poder y que no tuvieron empacho en cuestionar o criticar al Presidente Municipal.
Los regidores, aparte de representar y defender los intereses de la ciudadanía, deben ser contrapeso del poder municipal, deben participar entendiendo que ningún gobierno es perfecto, tampoco sus colaboradores, por eso es sano cuestionar y asumir un rol comprometido ante la opinión pública.
¿Qué tipo de regidores tuvimos en el 27 Ayuntamiento? pues en general regidores muy tibios, de poca astucia y me atrevo a decir que hasta de poco compromiso.
Los 3 jóvenes regidores del PRI jugaron su papel de oposición como era de esperarse, pero de forma nada o poco inteligente, careciendo totalmente de relevancia. Como oposición no basta con solamente atacar, hay que ser certero en tus señalamientos para tener impacto.
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Los 2 regidores de Morena ni se diga, se esperaba mucho más de ellos. Al comienzo los imaginamos con más compromiso, con mucho trabajo en las calles, con mucho debate en Cabildo, mayor presencia. Nada pasó con ellos. Igual con la regidora del PRD, que poco se dejó ver en Palacio.
De los regidores panistas también faltó mucho. Algunos se pasaron 3 años jugando a lo mismo de siempre, a señalar a la Gobernadora y defender al Presidente Municipal, a decir que los del PRI son esto y lo otro, pura politiquería, ¿así o más predecibles?
De hecho un par de regidoras panistas, fueron tan grises que por Dios que por más que traté de hacer memoria (antes de ponerme a escribir) nomás no pude recordar sus nombres. Una porque de plano se ausentó muchísimo de Cabildo, y la otra, una señora de cabello corto y lentes, porque ni la voz le conocí. Increíble que vaya a terminar la administración y jamás hayan salido a decir algo a la comunidad, ¡increíble!
El Dr. Abel Sánchez francamente también decepcionó, parece que le afectó mucho que le cortaran las aspiraciones de ser candidato, después de eso se supo poco o nada de su trabajo en Cabildo. Se le olvidó que representaba a la gente no a sus intereses. Le valió gorro.
En fin, muchos desaprovecharon su oportunidad pasando sin pena ni gloria, sin buscar hacer algo bueno, algo diferente y relevante.
Y no faltará quien diga: «Yo si hice mucho pero no lo anduve publicando ni vanagloriándome en los medios«, pues muy mal, la regiduría es un cargo público de cierta relevancia que requiere trabajo de comunicación. Deben informar qué están haciendo, en qué temas están trabajando, qué soluciones está gestionando para los problemas de la ciudad, etc. etc.
Ahora más que nunca la gente es muy severa en sus cuestionamientos, por eso y más, los regidores deben tratar de estar en constante comunicación con la comunidad. De lo contrario pasan desapercibidos y dando la sensación que no hicieron gran cosa, sólo levantar su mano y cobrar su sueldo.
En fin, esperemos que los próximos regidores, del partido que sea, PAN, PRI o Morena, sean más comprometidos y den mucho más de qué hablar.
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